La milanesa es un platillo internacionalmente común y con un sinfín de variantes: con papas fritas, huevos estrellados, a la parmesana, con salsa de tomate y las riquísimas tortas de milanesa con cualquier tipo de carne, ha sido uno de los platillos más aceptados en la cocina casera de muchos países por su sencilla preparación y su gran sabor.
Su nombre se le atribuye a la ciudad de Milán, aunque en diferentes regiones de Italia sugieren que la idea original es de ellos, en Milán la llaman cotoletta alla milanese, en Nápoles se le conoce como cotoletta alla napoletana, y en Palermo como cotoletta alla palermitana. En Alemania y países de habla alemana se la nombran Wiener schnitzel que quiere decir bistec vienés, pero parece que su origen es efectivamente de Lombardo, cuya capital es Milán, lugar de donde diferentes inmigrantes de origen alemán y austriacos la llevaron a sus países y posteriormente a las otras partes de Europa, a América latina llegó por Argentina, y de ahí a casi todo el continente americano.
En México ha sido el lugar donde mejor se ha aceptado la milanesa y se le ha dado nuevas presentaciones y tipos, quién no tiene su puesto favorito de tortas de milanesa (uno de los nuestros es la lonchería “Sur 12” cerca de Rojo Gómez), o quién no recuerda con agrado las milanesas que le preparaba su madre acompañada con un puré de papas y tortillas, combinación favorita de chicos y grandes y para los golosos las famosas “orejas de elefante” tan conocidas en las diferentes cantinas de la Ciudad de México.
Su nombre se le atribuye a la ciudad de Milán, aunque en diferentes regiones de Italia sugieren que la idea original es de ellos, en Milán la llaman cotoletta alla milanese, en Nápoles se le conoce como cotoletta alla napoletana, y en Palermo como cotoletta alla palermitana. En Alemania y países de habla alemana se la nombran Wiener schnitzel que quiere decir bistec vienés, pero parece que su origen es efectivamente de Lombardo, cuya capital es Milán, lugar de donde diferentes inmigrantes de origen alemán y austriacos la llevaron a sus países y posteriormente a las otras partes de Europa, a América latina llegó por Argentina, y de ahí a casi todo el continente americano.
En México ha sido el lugar donde mejor se ha aceptado la milanesa y se le ha dado nuevas presentaciones y tipos, quién no tiene su puesto favorito de tortas de milanesa (uno de los nuestros es la lonchería “Sur 12” cerca de Rojo Gómez), o quién no recuerda con agrado las milanesas que le preparaba su madre acompañada con un puré de papas y tortillas, combinación favorita de chicos y grandes y para los golosos las famosas “orejas de elefante” tan conocidas en las diferentes cantinas de la Ciudad de México.
Aquí en Fonda Mal Diablo te presentamos nuestra variante de la milanesa tradicional mexicana, con guacamole y puré de papa.
Pechuga de pato en filetitos empanizada con pepita verde, amaranto, pan molido, queso cotija y semillas de girasol, con puré de papa y gravy de pato junto con guacamole.
Pechuga de pato en filetitos empanizada con pepita verde, amaranto, pan molido, queso cotija y semillas de girasol, con puré de papa y gravy de pato junto con guacamole.
detalle del puré relleno de gravy |
¡Qué rico se ve! ;)
ResponderEliminar@_@ No encuentro el domicilio, horario ni nada por ningún lado. Comienzo a creer que esto es una ilusión porque tengo mucha hambre.
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